Como muchos de los problemas que aquejan a nuestra comunidad hace falta un poco de memoria, historia y análisis para entenderlos y ver de qué manera solucionarlos.
Lo primero que tenemos que considerar es el tema de la competencia, es decir quien tiene la obligación de mantener el servicio y proveer de agua a la población. Al día de hoy y en nuestra jurisdicción desde el punto de vista legal la provisión del servicio en el área urbana es una obligación de la Sociedad Agua del Tucumán-SAT y en la zona rural de la Sepapys.
Históricamente el servicio de provisión de agua potable era una responsabilidad de la Comuna. Luego cuando la ola privatizadora llego al país, es decir cuando se entregaba a la empresa privada los bienes del estado, nuestra provincia decidio avanzar y entregar a los privados el agua potable. De este modo, paso a manos de la SAT el servicio en nuestra localidad. Para ello hacia falta que el delegado Comunal de ese entonces diera la conformidad para el traspaso del servicio. El responsable comunal La Madrid de ese entonces firmo dicho instrumento y la SAT se hizo cargo.
Hubo delegados e Intendentes que se opusieron a esta iniciativa y hoy prestan el servicio de manera directa o a través de Cooperativas de Provisión de Agua Potable. ¿Un ejemplo? Acá cerca en el departamento de Graneros.
Cual es entonces el papel de la comuna en este tema, articular, acompañar, colaborar, para garantizar el servicio a la población. El gobierno local debe siempre priorizar la mejora de los servicios para el vecino, la empresa privada buscara siempre ganar dinero.
Entonces, cuando se hace anuncios desde la comuna de inversiones en un servicio que no es de su competencia, que legalmente no le pertenece, o se esta ante el desconocimiento de la normativa o se esta haciendo un uso político del trabajo de otros.
De una u otra manera, de una forma u otra, la verdad estimado vecino es que usted cuando abre la canilla no tiene agua.