El sacerdote Daniel Molina, ahora perteneciente a la Iglesia Vetero Católica Apostólica, oficia misa en nuestra localidad en las instalaciones de la Escuela de Folklore Raúl Acosta sito en calle Roca, ante una nutrida cantidad de seguidores convocados por el mismo.
El cura fue sancionado por la Iglesia Católica Apostólica Romana con 10 años en el ejercicio del ministerio, luego de un proceso administrativo que impone la normativa eclesiástica del catolicismo, por los presuntos abusos sexuales que el mismo habría cometido.
En una extensa nota periodística aparecida en el diario La Gaceta de hoy, el cura perteneciente a la corriente de sanadores o carismáticos, se defendió de las acusaciones tildándolas de falsas y su predisposición para acudir a la justicia ordinaria en busca de la verdad, que entiende no fue el propósito del proceso en el que fue sancionado.